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¿Cómo reconocer si su hijo es un “hablante tardío”?
Tener un inicio tardío en la aparición del lenguaje puede ser indicador de otros trastornos del neurodesarrollo, por ejemplo, el trastorno del espectro autista.
Miércoles 22 de agosto de 2018
Una de las principales preocupaciones de los padres en relación al desarrollo de sus hijos es la ausencia o retraso en la aparición de las primeras palabras. Muchas veces la consulta es tardía, ya que en la sociedad está difundida la creencia de que solo hay que esperar para que el niño hable y son frecuentes los comentarios como “no te preocupes, ya hablará” o “solo tienes que esperar, va a hablar solo”.
Al respecto, la académica de la carrera de Fonoaudiología de la Universidad San Sebastián, Tamara Pierart,puntualiza que “los niños que a los dos años dicen menos de 50 palabras y/o no utilizan frases de dos elementos son considerados hablantes tardíos. Entre un 13% y un 19% de los niños de 24 meses presentan esta condición”.
“Tener un inicio tardío en la aparición del lenguaje puede ser indicador de otros trastornos del neurodesarrollo, por ejemplo, el trastorno del espectro autista, además es el principal factor de riesgo para los niños que posteriormente presentarán un trastorno del desarrollo del lenguaje. No obstante, también puede ser una condición que evolucione de manera positiva logrando la resolución de sus dificultades antes de los cinco años”, complementa la académica.
Cerca de un 40% de estos hablantes tardíos persisten con sus dificultades de lenguaje a los cuatro años y evolucionan a cuadros más complejos y duraderos, por lo tanto, “para este grupo de menores la opción de esperar a que hable no es la indicada, ya que mientras más temprana sea la intervención mejor será el pronóstico a largo plazo“, explica Pierart.
Si bien existen algunas condiciones que se consideran como factores de riesgo para la persistencia de las dificultades de lenguaje en los hablantes tardíos, no es posible establecer con certeza qué niños lograrán resolver sus dificultades de lenguaje de forma espontánea y quiénes continuarán con ellas.
Así, “en nuestro sistema de salud la evaluación del lenguaje se hace en el marco de la evaluación del desarrollo psicomotor en los controles de niño sano, pero las pruebas que se aplican para esto han demostrado no ser adecuadas para detectar problemas de lenguaje de grado leve o moderado. Por ello, la indicación es que los padres que sospechen de un inicio tardío del lenguaje en sus hijos consulten al fonoaudiólogo que es el especialista en esta área para así establecer la necesidad de iniciar la intervención en los casos que lo requieran o programar un seguimiento periódico cuando la intervención no sea necesaria“, recomienda la académica de Fonoaudiología de la Universidad San Sebastián.