La escasa información sobre las microalgas nocivas que crecen naturalmente en las costas del país, recalca la necesidad de realizar estudios sobre sus efectos y mecanismos de acción en los peces.

Al respecto, gracias a un trabajo conjunto entre la Universidad San Sebastián y la Fundación Chile, se ha iniciado una investigación que busca validar un protocolo de bioensayo entre microalgas nocivas y su efecto en salmónidos.

En efecto, la investigadora responsable en el desarrollo de esa labor es la Dra. Alejandra Aguilera, directora del Bachillerato en Ciencias de la Salud en la U. San Sebastián en Puerto Montt, quien cuenta con una vasta trayectoria en el estudio de Floraciones Algales Nocivas (FAN) y su impacto en la acuicultura.

La académica comenta que son recordados los casos en la industria acuícola que han ocasionado pérdidas millonarias y problemas a la salud pública en las regiones de Los Ríos, de Los Lagos, de Aysén y de Magallanes, como el evento de marzo de 2016, cuando cinco mil toneladas de salmones muertos tuvieron que ser vertidos al mar, lo que ocasionó una posible especulación de una relación directa entre la floración de microalgas nocivas y la mortalidad de los peces.

“Si bien para la región los eventos pasados significaron una pérdida importante, debido a que es el principal mercado de comercio que tiene el sur del país, a nivel nacional no se han desarrollado protocolos de bioensayo para establecer la dosis de microalgas que provocan mortalidad en salmónidos, por lo que los resultados de este trabajo resultan trascendentes para la industria acuícola, porque permitirán la validación de un protocolo para realizar estos bioensayos”, explicó la Dra. Aguilera.

Sobre la investigación en sí, en dependencias de la U. San Sebastián sede De la Patagonia, se efectúa la mantención del material biológico (microalgas de diferentes especies) que están siendo utilizadas. En tanto, las pruebas con peces se realizan en la Estación Experimental de Fundación Chile en el sector de Quillaipe, en la carretera Austral.

Hasta el momento, se han efectuado ensayos preliminares para establecer estos protocolos de bioensayos, cuyos resultados se espera que estén disponibles a finales de este año. Para la doctora Aguilera, estos trabajos en conjunto donde se unen las empresas y las instituciones de educación son un claro ejemplo de contribución para el desarrollo regional y del país.