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Acompañar el cambio en tiempos de pandemia
El terapeuta puede acompañar y contener durante los procesos de adaptación a esta nueva normalidad, también asegurar la continuidad de atención en las diferentes áreas, de aquellas personas que se encontraban de forma previa en algún tratamiento, rehabilitación, estimulación, entrenamiento, u otra.
Lunes 28 de diciembre de 2020
En diciembre del año 2019 escuchábamos que estaba ocurriendo un suceso sin precedentes en la ciudad de Wuhan, China. Un virus desconocido y altamente contagioso comienza a afectar a la población. Es interesante recordar qué actividades, lugares, ocupaciones, prioridades teníamos durante ese periodo. Probablemente estábamos preocupados de finalizar el año a nivel laboral, universitario, escolar, con las clásicas celebraciones de navidad, actos, amigos secretos, o quizás nos encontrábamos reflexionando sobre los acontecimientos del estallido social y planificando las fiestas de fin de año para poder compartir con nuestros seres queridos, sin dimensionar aun lo que sucedería durante el año venidero.
El año 2020 traería a nuestras vidas una enorme cantidad de cambios. Muchos de ellos impactaron las actividades cotidianas como el aislamiento social y físico de familiares, seres queridos, amigos, actividades que antes realizábamos de forma rutinaria; trabajar, ir al colegio, universidad, jugar, ir al supermercado, ir a la playa, salir a caminar a una plaza, salir a comprar el pan, se vieron restringidas bajo la lógica del cuidado de la salud.
Entonces tuvieron que crearse nuevas formas de interactuar y de participar, a las cuales se sumaron nuevas actividades como el uso de mascarilla, alcohol gel, lavado de mano frecuentes, distanciamiento social y aforo de personas, entre otras.
La Terapia Ocupacional como profesión sociosanitaria, con un fuerte enfoque humanista, ha observado cómo los múltiples cambios han afectado a los ciudadanos en sus rutinas, intereses, roles y proyectos de vida. Considerando estas observaciones, el aporte de la Terapia Ocupacional está centrado en las actividades significativas que permitan al ser humano participar, incluirse, adaptarse y ocuparse en sus contextos cotidianos.
El terapeuta puede acompañar y contener durante los procesos de adaptación a esta nueva normalidad, también asegurar la continuidad de atención en las diferentes áreas, de aquellas personas que se encontraban de forma previa en algún tratamiento, rehabilitación, estimulación, entrenamiento, u otra. El desafío de nuestra profesión se encuentra en apoyar la construcción de significados a las nuevas actividades, redescubrir propósitos postergados que pueden desarrollarse en tiempos de aislamiento. Descubrir nuevas formas de comunicar, expresar, dar espacio para comprender las emociones de rabia, pena, angustia y acompañar a las personas en este periodo de tránsito en redefinir nuevas rutinas, metas, roles y reflexionar sobre las prioridades en sus vidas.
Como terapeuta ocupacional los invito a reflexionar: ¿cuáles son las actividades que durante la pandemia he realizado por primera vez?, ¿qué desafíos y metas pude lograr el año 2020?, ¿a cuántos eventos nuevos logré adaptarme este año? Todas las respuestas a estas preguntas cobran un valor enorme como mecanismos de adaptación frente a sucesos tan complejos como una pandemia.