Hace cuatro años un grupo de siete investigadores liderados por el Dr. Alfonso González crearon el Centro de Biología Celular y Biomedicina (CEBICEM) y el programa de doctorado de Biología Celular y Biomedicina que recientemente obtuvo una acreditación por 3 años por parte de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA). Hoy, ya está próxima a graduarse la primera generación de estudiantes, de una cohorte de 23 matriculados a la fecha y con un claustro académico de 14 profesores.

Cumplida esta primera etapa, se inicia una segunda, a cargo de la Dra. Patricia Burgos, destacada científica y discípula del Dr. González, quien asume la dirección del doctorado cuyo desafío ahora es la internacionalización del programa, el fortalecimiento del claustro académico y la vinculación del quehacer científico con las necesidades de la sociedad a través de la Vinculación con el Medio y divulgación del conocimiento científico, entre otros desafíos. 

“Quiero agradecer y felicitar al Dr. Alfonso Gonzalez por su gestión en los años en los que estuvo a cargo de la dirección de este programa. El demostró, sin duda, una conducción ejemplar, que ha culminado con un hito clave y trascendente: la acreditación del programa por 3 años. Este es un logro significativo, un reconocimiento que nos ha llenado de satisfacción y orgullo”, indicó el rector Carlos Williamson.

La autoridad USS agregó que “sabemos que los doctores que trabajan en todas las instituciones de educación superior de Chile no llegan a los 10 mil, lo que revela que nuestro país no tiene aún los recursos humanos instalados en las universidades para dar sustento a un conjunto de investigadores con alta dedicación a la investigación. Y esa deuda aún sigue vigente, lo que da aún mayor realce a una universidad que sin recursos públicos institucionales, crea un doctorado como éste”.

Desafíos nueva directora

Patricia Burgos Hitschfeld, bioquímica y Doctora en Ciencias Biológicas, mención Biología Celular y Molecular, se incorporó a la U. San Sebastián el 2017, como investigadora del Centro de Biología Celular y Biomedicina y como académica de la Facultad de Medicina y Ciencia.

En sus años como científica, se ha dedicado a estudiar las células a nivel molecular, para comprender el funcionamiento de nuestro organismo, y subsanar los mecanismos que las atrofian con el fin de aplicar este conocimiento para entender y controlar enfermedades y avanzar en el desarrollo de alternativas terapéuticas.

“Que Patricia Burgos se haga cargo del doctorado no puede más que producirme un tremendo orgullo. Ella es una de mis estudiantes más connotadas, que tiene un motor propio, y que seguramente le va a dar a este programa y a la universidad un nuevo impulso”, señaló el Dr. Alfonso González, quien en la oportunidad agradeció a todos quienes iniciaron con él la aventura de crear el primer doctorado USS, a sus estudiantes de postgrado por “tomar el riesgo” de esta travesía y a la Universidad por la oportunidad y el apoyo, en particular a la vicerrectoría de Investigación y Doctorados (Dras. Carolina Gatica y Pamela Cámpora) y a la vicerrectoría de Aseguramiento de la Calidad (Gonzalo Puentes y Eliana Urrutia).

La Dra. Burgos, indicó que su objetivo es continuar con el legado del proyecto, asumiendo nuevos desafíos. Dentro de sus primeras tareas -adelantó- estará: trazar los lineamientos académicos y administrativos para graduar a la primera cohorte del programa; implementar las recomendaciones de la CNA que incluye el rediseño del plan de estudios y fortalecer el claustro académico en todas las sedes de la USS; y la internacionalización del programa, a través de integrar profesores y estudiantes extranjeros, establecer alianzas con programas de otras instituciones académicas, entre otras acciones.

Por su parte, el vicerrector de Investigación y Doctorados, Dr. Carlos Vio, destacó el impulso que ha tenido el área en el último año, que pasó de 2 a 6 programas de doctorado. “Las personas capaces de hacer investigación son muy pocas y difíciles de reconocer, por lo tanto, nuestra tarea como administradores es reconocer a esas personas y darles las posibilidades para desarrollar su talento, y eso es lo que hacemos desde la VRID”. De igual manera destacó la importancia de la integridad en la investigación, la seguridad y la ética de la investigación y adelantó el proyecto de la creación de una dirección que se haga cargo de estas importantes materias.