Una semana cumple hoy como presidente de la Asociación de Facultades de Medicina de Chile (Asofamech), el doctor Antonio Orellana, actual decano de esa carrera de la Universidad de Valparaíso. Dice que espera hacer una gestión centrada en las casas de estudio de regiones, con mucha cohesión y respetando los objetivos que cada facultad tiene. Por lo pronto sí, ya definió su postura frente al Eunacom, el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina, luego de constantes críticas a cómo funciona. “El examen nunca va a morir ni debe morir, porque es una herramienta para medir la calidad de los médicos que salen de nuestras universidades”, sentencia. Su pensamiento se refuerza más luego que el 61% de los médicos que rindieron la prueba el pasado 13 de julio la reprobara. En el caso de los titulados en territorio nacional, el 31% no logró nota azul. 

Respecto a quién ocupara la vicepresidencia de Asofamech, dice que para mantener la “transversalidad” de la institución, ha conversado con el decano de medicina de la Universidad Andrés Bello, Jaime Contreras, para que él sea quien lo acompañe los siguientes dos años. 

- ¿Cuál es el objetivo en mente al asumir por dos años la presidencia de Asofamech?

- Primero que todo, el deseo de cooperar en una entidad que reúne en este momento 20 universidades que dictan la carrera de medicina. Y en segundo lugar, colocar en la mesa la importancia que significa las regiones, o sea, descentralizar un poco sin quitarle el valor a la región Metropolitana. La idea es elevar que las regiones en Chile tienen diferentes necesidades y obviamente estas necesidades es necesario que estén en la mesa de discusión. En ese sentido, como represento a una universidad estatal, pero fundamentalmente regional, es otra de las motivaciones que tuve también para postular a la presidencia.

- ¿Qué plus cree usted que puede entregar?

- La idea que tengo es dividir un poco el territorio en núcleos del norte, sur y centro del país, más que nada pensando que cada uno de  esos núcleos tenga la posibilidad de negociar las necesidades con sus respectivos centros de salud. Me refiero, por ejemplo, la política nacional para formar especialistas la veo buena por resultados, sin embargo hoy se ve que esos especialistas se concentran fundamentalmente en tres grandes regiones: Metropolitana, Valparaíso y Biobío, pero si vas a buscar especialistas a los extremos del país, obviamente ahí hay un déficit enorme. Entonces creo que la posibilidad de que cada uno de estos representantes en nombre de Asofamech pueda negociar directamente con los directores de servicios, con los directores de hospitales, por ejemplo, y participar de su planificación estratégica de los hospitales, va hacer que tengan más acceso a los campos clínicos, a la relación directa con los hospitales, los servicios de salud, porque cada una de las universidades conoce las necesidades de sus regiones.  

- La idea es buscar la solución ahí mismo y no salir fuera

- Exactamente. El contacto va a ser más directo. La retribución que tienen que hacer las universidades a los servicios de salud va a ser también mejor conversada y más útil.

- En estos dos años, ¿hay otros objetivos más transversales?

- Claro, está la relación directa y permanente  que debiera tener Asofamech con las otras instituciones que se conectan: los ministerios de Salud, de Educación o el Colegio Médico ya que ellos tiene un departamento de formación con el cual debiéramos trabajar muy cercano. También trabajar con las asociaciones de especialistas médicos y también con todas aquellas sociedades o fundaciones que se dedican a la educación médica. La idea es trabajar en conjunto para socializar lo que Asofamech es, transformarla en garante de los problemas de salud que existen. Debiera ser un participante activo de todos los problemas de salud que hoy día se discuten en el país.

- Trabajar en conjunto dice usted.

- Un tema muy importante es la cohesión. Eso es como una declaración de principios de mi presidencia. La Asofamech está formada hoy día por todo el espectro de universidades que tienen diferentes orígenes. Hay universidades estatales y públicas, públicas que no son estatales, están las privadas. Y acá una de las cosas importantes es mantener la cohesión. Que cada una de ellas se sienta partícipe de Asofamech, porque Asofamech respeta su misión, visión y objetivos. Eso es importante para que en conjunto logremos y hagamos de la institución un lugar importante del escenario en educación médica y calidad en el país.   

- Los proyectos e ideas son muchas para hacer en dos años…

- Claro, ese es el gran problema. La limitación del tiempo. Hay que ir viendo cómo se dan los procesos, porque en nuestro país suelen ser largos y el tiempo a veces no alcanza.

- Una de las críticas más recurrentes a Asofamech es que tiene capturado el Eunacom y que este debiera desaparecer para permitir más ingresos de médicos al sistema de salud chileno ¿Qué opina usted?

- El Examen Médico Nacional nunca va a morir ni debe morir, porque es una herramienta para medir la calidad de los médicos que salen de nuestras universidades, lo que nos permite saber en qué áreas tienen déficit y con eso nos permite retroalimentarnos porque vamos a ir a cada una de las escuelas y constatamos que hay cierto déficit en tal área, por lo que tengo que preocuparme que eso se renueve y se mejore. Por tanto, el Eunacom es una herramienta fundamental para medir la calidad. Además, nosotros tenemos una obligación con nuestros conciudadanos de entregar a la comunidad médicos que sean capaz de solucionar los problemas de salud de la población.

- ¿Pero está abierto a hacer mejoras?

- Eliminarlo jamás, siempre va a estar con nosotros. Ahora, si se quiere conversar sobre los contenidos, por ejemplo, por parte del ministerio de Salud, se puede hacer.

- Y respecto a la crítica de que este examen está capturado por ustedes y el Colegio Médico, y que debiera ser otra institución quien los administre y que se fijan cuotas para salir al mercado ¿qué opina?

- Eso no es cierto. Se están abriendo cada vez más vacantes. Incluso, dado el número de médicos que se está titulando desde el año pasado se está haciendo dos veces al año el examen. De hecho, las autoridades pertinentes no han dado cabida a eso porque nosotros no tenemos acciones coercitivas ni colusión ni nada de eso. Lo que pasa es que el Colegio Médico es socio nuestro en lo que se refiere a cómo se dan los elementos que van orientados a mejorar la calidad de los médicos que se están formando en Chile. Ahora, la gente que viene de afuera tiene el derecho a trabajar igual que nosotros, pero bajo las mismas reglas. Eso es fundamental.

- Desmiente entonces que hay discriminación hacia los profesionales de salud extranjeros.

- Absolutamente ninguna. Ellos tienen los mismos derechos, hacen las mismas pruebas que los nacionales, y nunca hemos pensado tampoco que vengan médicos extranjeros o bloquearles el trabajo. En absoluto. Solo pedimos que la calidad sea comparable porque van a atender a nuestra gente, a nuestra población.