Tras el anuncio de la suspensión temporal del uso de la vacuna SARS-Cov-2 de Astrazeneca en algunos países miembros de la Unión Europea, por posibles efectos secundarios, el Instituto de Salud Pública de Chile (ISP) señaló que "no existe evidencia suficiente para asegurar que los eventos tromboembólicos presentados estén asociados a la administración de la vacuna".
La agencia regulatoria chilena agregó que "no se justifica la adopción de alguna medida sanitaria en nuestro país. Cabe recordar que esta vacuna fue autorizada provisionalmente para su uso de emergencia en Chile, pero aún no se ha dado inicio a su importación, distribución y uso".
De acuerdo a lo informado por el ISP, el laboratorio fabricante de esta vacuna indicó que se realizó un análisis de los datos de seguridad de más de 10 millones de registros, sin demostrar evidencia de un mayor riesgo de embolia pulmonar o trombosis venosa en los grupos vacunados.
"El ISP tomó contacto con la Agencia Europea del Medicamento (EMA) desde donde se ha señalado que no hay indicios de que la vacunación haya causado los eventos presentados y que corresponden a un lote especifico reportado por Austria, país que, de manera preventiva, suspendió su uso mientras investiga dos eventos de reacciones presuntamente atribuibles a la inoculación", señaló el organismo en un comunicado.
El ISP agregó que "es importante recalcar que la posición del comité de seguridad de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) es que los beneficios de la vacuna superan sus riesgos y la vacuna puede continuar administrándose, mientras se realiza la investigación de los casos de eventos tromboembólicos. En esta misma línea, las agencias de España, Reino Unido, Francia y Australia, continúan su programa de inmunización con la vacuna SARS CoV-2 de AstraZeneca".