Un importante aumento en el consumo de marihuana reveló el Décimo Segundo Estudio Nacional de Drogas en Población General realizado por el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (SENDA). Pasó de 4,6% en el 2010 a 14,5% en el 2016, cifra que se traduce en un incremento de la prevalencia de uso de esta sustancia de 215,2% en los últimos 6 años. Esta alza se registró tanto en hombres como en mujeres.
El alza más significativa se manifiesta en la población adulta de 19 a 34 años, alcanzando un 33,3% de personas que la han consumido en el último año.
"A diferencia de lo que se apareció en el estudio anterior, donde los aumentos observados en la prevalencia de uso de marihuana fue independiente del nivel socioeconómico, en 2016 se observan aumentos significativos en el NSE Bajo (de 10,6% en 2014 a 14,4% en 2016) y NSE Alto, que llega a 16,6% en 2016 (12,5% en 2014)", señala el informe del Senda.
Alcohol y bebidas energéticas
En cuanto al consumo de alcohol, los resultados del estudio muestran una estabilización de los números: Un 63,9% declara haber bebido durante los últimos 12 meses, 0,5 puntos porcentuales mayor que en el 2014.
La sorpresa es el salto en la ingesta de bebidas energéticas. Si bien se aprecia la tendencia viene creciendo sistemáticamente desde 2010, "en la última versión del estudio se registraron aumentos significativos en las tres medidas reportadas. La prevalencia de “consumo alguna vez en la vida” en 2016 es 47,8%, la de “último año” llegó a 29,7% y la de “último mes” está en 13,1%", indica el reporte.
Tabaco y cigarrillo electrónico
En Chile todavía se fuma, un 37,9% de la población adulta declara que consume cigarrillos, pero la tendencia es a la baja respecto a mediciones anteriores. La buena noticia es que se aprecia un descenso significativo en el consumo en adolescentes de 8,4% a 5,5%.
La señal de alerta es el consumo de cigarrillos electrónicos. Un 66,5% de los entrevistados en el estudio declaró conocer estos dispositivos y un 6,5% señaló que lo utilizó en el último año, lo que representa un incremento de casi 3 puntos porcentuales con respecto a lo manifestado en 2014, donde 3,6% aseguró que los usaba. "Entre los 12 y 25 años se observan las mayores declaraciones de uso (8,3% en adolescentes y 12,0% en población de 19 a 25 años)", afirma el informe.