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46% de usuarios Fonasa que necesitan hospitalizarse no pueden hacerlo por falta de cama
Segunda versión de la Encuesta “La Brújula Salud” también muestra que en el sistema público hay 6 veces más probabilidad de esperar para internarse que en una Isapre.
Jueves 8 de octubre de 2015
Una nueva edición de La Brújula Salud, la encuesta bimestral de Monitoreo de Indicadores y Percepción del Sistema de Salud de Chile, entregó la Dirección de Estudios de la U. San Sebastián (vea estudio completo adjunto al final de esta crónica). A diferencia de la primera versión de agosto -dedicada a la falta de especialistas- el análisis ahora se centró en el problema de las listas de espera para hospitalización.
La estadística señala que en los últimos dos años, 8 de cada 100 personas que van al médico tienen indicación de internarse. Sin embargo, no todas logran hacerlo, y si pertenecen a FONASA su dificultad es aún mayor: un tercio de ellas no tiene acceso. Esto significa que los usuarios del seguro público tienen 6 veces más probabilidad de quedar en una lista de espera que los afiliados a una Isapre.
"Aquí ya empezamos a encontrar elementos de inequidad, porque hay un mundo de diferencia entre estar en Fonasa y estar en Isapre", planteó Fabián Riquelme, director de Estudios de la U. San Sebastián.
Al sondear en las causas principales de la No Hospitalización indicada por el médico, el 46,3% de los pacientes de FONASA respondió que es porque no había camas disponibles, y un 10,5% porque no tenía el dinero para pagar esa prestación. En el caso de los afiliados a Isapre, el principal motivo (66,7%) es porque la propia persona decidió no hospitalizarse.
Otro dato relevante de la Brújula Salud de octubre es que la mitad de los pacientes de Fonasa espera más de 1 año para ser hospitalizados, mientras que en el caso de los usuarios de Isapres la espera es de 2 a 6 meses.
Al indagar en el motivo de la hospitalización indicada, el 41,9% de los entrevistados indica que es por una enfermedad aguda y un 34,4% por una patología crónica.
Como consecuencia, el 44,1% de las personas en lista de espera asegura que su salud ha empeorado durante el tiempo de espera.
"En resumen: existe una inequidad, las personas esperan hace mucho tiempo, incluso esperan por exámenes, y su salud empeora en el intertanto", señaló el director de Estudios de la USS, Fabián Riquelme.
Estos altos niveles de inequidad en relación a los indicadores de hospitalización detectados por esta versión de La Brújula Salud también están presentes en otro tipo de prestaciones, como la consulta médica ambulatoria donde –según la anterior encuesta de agosto- un 45,7% de los usuarios de Fonasa estaba en lista de espera.
El director del Instituto de Políticas Públicas de la universidad, Jaime Mañalich, opinó que "hay un problema estructural, que es el número de camas insuficiente para las necesidades sanitarias del país. En números redondos, el sector público chileno tiene 26 mil camas y el privado aproximadamente 14 mil, lo que significa 2,2 camas por mil habitantes. Y esto es muy poco".
Según datos del año 2012, el promedio de camas por habitantes en los países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) es 4,8/1000. El 2,2 que tiene Chile –menos de la mitad- ubica a nuestro país en el penúltimo lugar del ranking internacional.
"De ahí la imperiosa necesidad de algunas medidas funcionales", enfatizó Jaime Mañalich. "Por ejemplo hacer muchas más cirugías ambulatorias para que la gente no tenga que hospitalizarse –donde creo que estamos avanzando-, pero la necesidad de camas es absoluta. Desgraciadamente eso significa que los gobiernos, a pesar de sus declaraciones o intenciones, tienen que seguir comprando masivamente recursos-cama al sector privado para poder satisfacer la demanda de la ciudadanía", concluyó el director de IPSUSS.
La medición de octubre de La Brújula Salud abarcó una muestra de 2.280 personas mayores de 15 años, con alcance nacional.