La detección temprana de Hipoacusia se puede realizar de forma sencilla y rápida utilizando un examen auditivo llamado Emisiones Otoacústicas. La principal ventaja de este examen es que se puede aplicar después de solo algunas horas del nacimiento, de preferencia, 48 horas después para evitar falsos positivos. El equipamiento necesario es de bajo costo (si se compara con otros equipos que se usan para evaluar la audición), el examen demora entre 5 y 10 minutos y si es el bebé está dormido y las condiciones ambientales son adecuadas (bajo ruido ambiental), este tiempo es incluso menor. Obviamente es muy importante la expertiz del examinador, ya que debe saber usar el equipo correctamente y ubicar la oliva (accesorio de goma) en forma adecuada en el conducto auditivo externo del bebé.

Las emisiones otoacústicas son sonidos que se producen en la cóclea en respuesta a un estímulo, es por esto que se llaman emisiones Otoacústicas evocadas. Existen las emisiones Otoacústicas espontáneas, pero no se utilizan mayormente en la clínica, ya que no están presentes en todas las personas. Este examen se utiliza principalmente como screening o tamizaje, debido a que permite conocer en forma rápida y temprana, como está la audición de un bebé.

Cuando las emisiones Otoacústicas están presentes, la audición del recién nacido está dentro de rangos de normalidad pero si están ausentes, no necesariamente vamos a estar frente a una hipoacusia, ya que, como mencioné, este examen se usa como screening, por lo tanto, el resultado va a indicar que es necesario realizar otros exámenes que son de mayor complejidad y que entregan mayor información, como por ejemplo un Potencial Evocado de Tronco Cerebral o BERA.

Es importante mencionar que este examen no solo se realiza a bebés, de hecho, se puede utilizar a cualquier edad, pero se usa principalmente con bebés o niños pequeños ya que para conocer el resultado, no es necesario que respondan o indiquen si están escuchando o no.

¿Por qué es importante realizar esta evaluación? Porque cuando un niño nace con alguna pérdida auditiva que no es detectada a tiempo, su desarrollo se verá afectado, esto provocará una serie de consecuencias a nivel emocional, familiar, social y escolar. La principal vía para desarrollar el lenguaje, es la audición, por lo tanto, si la audición está alterada y no se toman las medidas necesarias (como por ejemplo implementar con audífonos), el desarrollo del lenguaje estará seriamente comprometido.

Por el contrario, si la pérdida auditiva se detecta en forma temprana, se realiza un diagnóstico y se interviene también en forma temprana (antes del primer año de vida) con audífonos o implante coclear y terapia fonoaudiológica acorde a sus necesidades, el desarrollo del lenguaje se verá enormemente beneficiado.