Si bien a diferencia de nuestros tatarabuelos, ya no necesitamos caminar largas distancias ni cargar pesos como parte de las actividades cotidianas, estamos aún lejos de que el organismo se adapte al sedentarismo de la vida actual. Y en esta transición desde un cuerpo hecho para caminar, correr, arrastrar pesos, hacia otro que pasa el día sentado ante un escritorio, que se moviliza en auto, bus o metro y que come azúcar refinada y grasas industriales, es lógico que se produzca un desequilibrio.
Ese desbalance por inactividad se traduce nada menos que en 7% de los casos de diabetes tipo II en el mundo, 6% de la carga de enfermedad cardíaca coronaria (por obstrucción de arterias) y 10% de los casos de cáncer mamario y de colon, según el Colegio Americano de Medicina del Deporte. Peor aún: estar biológicamente hechos para movernos y no hacerlo, es responsable de más de 5 millones de muertes prematuras, es decir el 9% de todas las muertes ocurridas cada año. 

"Considerando que tenemos esa base genética, biológica, fisiológica y anatómica que hace que tengamos músculos que necesitan oxígeno y energía, entonces es difícil que en la evolución cercana –no sabemos qué va a pasar en mil años- podamos adaptarnos al sedentarismo y podamos mantenernos física y sicológicamente saludables sin movernos" advierte el médico Matías Morán, docente de la Universidad San Sebastián.

El profesional se especializó en fisiología y fisiopatología (cómo funcionan los sistemas del cuerpo y cómo se producen las enfermedades) y es uno de los médicos que usa la actividad física y el deporte como herramienta terapéutica.

El primer beneficio de los ejercicios en la salud se debe al gasto de calorías. O sea, quemar el alimento que se ha consumido y evitar que se acumule como grasa en el cuerpo. Segundo, utilizar los músculos del cuerpo para que se desarrollen y utilicen los azúcares ingeridos. Tercero, fortalecer uno de los músculos más importantes del cuerpo: el corazón.

"Asociado a esto de moverse, al hacer ejercicio las articulaciones se mantienen más lubricadas y eso permite hacer las actividades diarias de mejor manera, y ayuda a prevenir lesiones. Si eres físicamente activo vas a tener menos dolor lumbar o menos dolor articular", explica el doctor Morán. "Para prevenir enfermedades el ejercicio es esencial, y para tratar enfermedades es un auxiliar a las terapias específicas farmacológicas".

La literatura médica ha estudiado y comprobado ya el impacto positivo que tiene el ejercicio físico para tratar problemas como la diabetes (10% en Chile según la Encuesta Nacional de Salud 2010), el colesterol alto (38,5%) o la hipertensión (27%). Pero además ha ido revelando sus beneficios en otros campos, menos evidentes hasta hace poco.

"Hay trabajos científicos que muestran cómo cambia la actividad del cerebro cuando se hace ejercicio físico. Se ve el estímulo en ciertas áreas específicas que nos hacen sentir mejor, ligado a la liberación de endorfinas con el ejercicio. En adultos mayores se ha visto que ayuda a mantener por más tiempo las áreas ligadas a la memoria y eso permite retardar o prevenir demencias seniles. En el caso de los niños con déficit atencional ayuda a mejorar la concentración. Desde el punto de vista neuropsiquiátrico, en las personas con depresión o trastornos del ánimo, el ejercicio es una de las indicaciones específicas que hacen los siquiatras para que los pacientes tengan menos recaídas. Todo esto por la liberación de endorfinas en el cerebro y tal vez mayor oxigenación".

Sin embargo, el uso de la actividad física como herramienta terapéutica aún no está arraigado en la formación de los médicos. "Hasta el momento no salimos de la universidad sabiendo mucho de ejercicios en específico, como para decirle al paciente cuánto ejercicio debe hacer de qué tipo, etc." dice el doctor Morán. "sino que sólo sabemos decirle al paciente 'salga a caminar, haga ejercicio'. Y ahí entra fuerte el trabajo de los profesores de educación física".

¿Profesor de Educación Física o Promotor de Salud?
En 2012 la Universidad San Sebastián formó la Facultad de Ciencias de la Actividad Física, en respuesta a los cambios curriculares que el Ministerio de Educación había introducido en el ramo escolar de Educación Física, que desde entonces pasó a llamarse Educación Física y Salud. 

Este nuevo enfoque le dio a la asignatura una responsabilidad más amplia que el simple deporte e incluyó el autocuidado en los niños y jóvenes para su salud futura. Y la USS "se hizo cargo de esto", explica el director de la carrera, Patricio Arroyo. "Si bien nuestro título profesional es de Pedagogía en Educación Física, nuestra carrera se ha abocado a mostrarles a nuestros alumnos el abanico de posibilidades que tienen para trabajar, y en eso se le da mucho énfasis al tema de salud".

De partida, el hecho de funcionar en el Campus Los Leones de Santiago, donde se concentran las carreras del sector médico, les permite a los estudiantes vincularse con los futuros kinesiólogos, psicólogos, enfermeras o médicos. Y segundo, el currículum incluye un área científica a cargo de especialistas, como magísteres en Medicina del Deporte, en Sicomotricidad, y un doctor en Nutrición.

"Tenemos ítems en algunas asignaturas que no se pasan en otras universidades. Por ejemplo logramos que sin ser kinesiólogos los alumnos puedan hacer valoraciones posturales, saber cuándo un escolar tiene una alteración en la columna, es decir entrenar un poquito más el ojo", dice el director de la carrera.

"Nosotros les damos esta intencionalidad en todas las asignaturas. Tienen Biología, Anatomía, Fisiología, y cuando llegan a Biomecánica se junta con Fisiología del Ejercicio y ahí algunas temáticas son las enfermedades crónicas, como los síndromes metabólicos, diabetes, hipertensión, y se habla de estas patologías y se les explica la función o la importancia del ejercicio ante estas patologías, tanto para prevenirlas como para tratarlas. Por lo tanto, el profesor cuando llega al colegio, al explicarles a los niños por qué hay que hacer ejercicios, él lo ve desde el punto de vista más de la salud que del jugar y saltar".

"Si hay una persona operada del corazón, lo van a ver los médicos, el kinesiólogo lo va a dejar funcional y le va a prescribir ejercicio, y debería tomarlo el profesor de educación física para terminar la progresión", explica Patricio Arroyo. "Con toda la promoción de salud que existe actualmente se ha revelado que el ejercicio es fundamental. Si yo tengo el gen de alguna enfermedad y soy sedentario voy a desarrollar la enfermedad. Pero se ha demostrado que aunque tenga el gen y se manifieste, si yo hago ejercicio, el ejercicio va a mantener la salud en la persona. Por lo tanto aparecemos nosotros, diciendo que también podemos guiar el ejercicio ligado a la salud, y no sólo estimular deporte, o recreación o pedagogía, sino que irnos al área de ejercicio ligado a la salud".

Taller de Medicina y Salud en la USS
En Estados Unidos, el Colegio Americano de Medicina del Deporte creó un programa especial para promover el uso del ejercicio físico como elemento de prevención o tratamiento de pacientes. Una parte de su trabajo es capacitar a los profesionales para que conozcan este aspecto. Chile es uno de los 43 países asociados a este esfuerzo y ya está efectuando certificaciones en este campo. La Universidad San Sebastián está planificando realizar un taller este año, con una parte teórica y otra práctica, justamente para promover el tema entre los médicos del país.