Actualmente en Chile se invierte el 0,38% del PIB en investigación, cifra que está muy por debajo del promedio de países que participan de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), que alcanza un 2% promedio.

Eso, sumado a sucesos como renuncias del ex presidente de Conicyt Francisco Brieva, y al bajo presupuesto proyectado para 2016 de 0,34% del PIB, hicieron que los investigadores chilenos sacaran su voz de rechazo frente a la situación.

Uno de los investigadores principales del proyecto Anillo Nemesis, que realiza estudios sobre el cáncer, enfermedades cardiovasculares y diabetes, Andrew Quest, aseguró que la creación de un Ministerio de Ciencia y Tecnología mejoraría la situación que actualmente se vive en esta materia.

"Si hubiese un ministerio de Ciencia y Tecnología, tendríamos una coordinación entre los diferentes estamentos mucho más eficaz y, por supuesto, se realizaría un uso mucho más eficientes de los recursos disponibles, generando políticas públicas a largo plazo, que eso es lo que está faltando hoy, no hay una hoja de ruta", afirmó Quest.

El investigador Enrique Jaimovich, está de acuerdo en que una buena política pública podría mejorar la situación. "Hace mucha falta una política fuerte de inserción de nuevos científicos en la academia y en el sector productivo. Esta política pasa por el desarrollo de nuevos centros de investigación a lo largo del país, por la renovación y equipamiento de los centros existentes y por el estímulo para el desarrollo de universidades de excelencia."

Es importante mencionar que los países desarrollados están invirtiendo mucho dinero en innovación y desarrollo, de hecho China aumentó en un 20% su inversión en el último año, transformándose en el país con mayor crecimiento en esta materia. Estados Unidos, Inglaterra y Rusia, por ejemplo invierten más del 5% del PIB para investigaciones.

"Nosotros llegamos en 1999 y en estos 17 años de investigaciones en Chile el financiamiento en ciencia y tecnología no ha aumentado, ha sido siempre el mismo de casi un 0,4% del PIB, dejando a Chile en el último lugar del ranking de la OCDE y es por eso que nosotros siempre hemos pedido que Chile se tiene que convertir en una sociedad de conocimiento", indicó Quest.

Pero Jaimovich tiene una mirada más optimista frente a la situación. "Evidentemente no es suficiente y se necesita una política de Estado de largo plazo para salir de esta situación. Chile debe mirar a los países de la OCDE como un ejemplo a seguir. La ciencia chilena es escasa pero tenemos muchos ejemplos de buena ciencia que se ha logrado hacer con pocos recursos y en condiciones desfavorables. Eso nos habla de que sin duda será posible hacer muchísimo más invirtiendo más recursos pero con una planificación adecuada y disminuyendo las trabas que actualmente enfrentan nuestros investigadores", aseveró el académico.

La situación económica de nuestro país está muy influenciada por las economías internacionales y en relación a la investigación, desarrollo y tecnologías Chile es dependientes de lo que se realiza en el mundo. En relación a esto Enrique Jaimovich argumentó que la tecnología desarrollada en Chile es clave para el desarrollo económico y para crear una escuela de pensamiento, ésta la otorga el desarrollo de la investigación científica en el país.

Según el sondeo realizado por el Instituto de Políticas Públicas en Salud de la Universidad San Sebastián (IPSUSS), el 91% de los consultados votaron a favor de que el Estado aumente el financiamiento para la investigación.