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Telemedicina: La salud digital del futuro
Así como el sistema sanitario debió utilizar la telemedicina para responder a la demanda de atención no COVID-19, la USS utilizó la Telesimulación para enfrentar la suspensión de la actividad presencial en campos clínicos.
Lunes 2 de agosto de 2021
Desde el inicio de la pandemia el crecimiento del uso de la telemedicina en salud ha sido exponencial. Si a inicios del 2020, las teleconsultas apenas alcanzaban el centenar a los cinco meses de la crisis sanitaria ya superaban más de 500 mil mensuales tanto en el sistema público y privado de salud.
Se trata del ejercicio de la medicina a distancia, utilizando diversas tecnologías de comunicación e información. En el sistema de salud ha sido de gran ayuda para disminuir las listas de espera de algunas especialidades médicas o en controles de enfermedades crónicas, especialmente en el contexto de pandemia.
“Gran parte de las atenciones de salud tienen un componente que comprende entrevista clínica y otro que corresponde al examen físico. La primera etapa concerniente a la comunicación es perfectamente abordable a través de la asistencia remota o teleasistencia. En éstas pueden abordarse aspectos tales como: historia clínica, antecedentes del paciente, indagar el motivo de consulta o revisar algún examen y resolver dudas”, explica la doctora Roxana Buscaglione, docente instructor del Hospital de Simulación USS.
La profesional agrega que “presta mucha utilidad en el control de personas con enfermedades crónicas, revisión de exámenes como seguimiento de pacientes que cursan con algún diagnostico específico, educación o resolución de dudas de los pacientes respecto de algún tratamiento o bien de identificar signos de alarma de cualquier condición donde se requiera saber si realmente debe acudir presencialmente a algún establecimiento de salud”.
La principal ventaja que tiene este sistema es que “dependiendo del motivo de consulta hay condiciones que pueden resolverse prácticamente en su totalidad para el paciente, o bien generar avances significativos en su proceso asistencial, por ejemplo, definiendo la necesidad de estudio complementario e indicarlo. Esto representa un enorme paso considerando el complejo escenario sanitario por la pandemia que obligó a posponer las atenciones no vinculadas al COVID-19 en el peak de la epidemia”, comenta la académica.
Buscaglione señala que la telemedicina “será probablemente una estrategia de mayor uso en el mediano y largo plazo, por lo que la implementación de estas metodologías durante la formación de los futuros profesionales de salud en las universidades constituye una forma de acercar a los estudiantes a la ‘medicina del futuro’”.
TeleSimulación
Para hacer frente a la suspensión de la actividad presencial en campos clínicos, la U. San Sebastián (USS) implementó la TeleSimulación.
“En la USS la asignatura de Semiología se imparte en tercer año de Medicina y representa el primer acercamiento clínico de los estudiantes tanto al campo clínico como para aprender a construir una relación ‘médico-paciente’. A raíz de la pandemia y la suspensión de la actividad presencial en campos clínicos en primer trimestre del año pasado, se decidió implementar este tipo de actividad educativa, con el uso de paciente simulado vía remota”, dice la doctora Buscaglione.
Para ello se diseñaron casos clínicos y un contexto de asistencia tipo telemedicina “donde el estudiante tiene la oportunidad de practicar la habilidad de la entrevista clínica, establecer un vínculo relacional y participar activamente en las sesiones, entrevistando al ‘paciente’ que es un actor entrenado para tales fines. Todo, asistido y modelado por un docente con experiencia en la metodología. La experiencia ha sido bien recibida por estudiantes y docentes”.
