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Bodegas oscuras: la burocracia pública en el manejo de los medicamentos
Luego que se conociera que el Servicio de Salud de Viña del Mar- Quillota tenía medicamentos vencidos en su bodega por más de 35 millones de pesos, cabe preguntarse ¿cuáles son las causas de tan mala gestión?
Jueves 10 de marzo de 2016
Luego que se conociera que el Servicio de Salud de Viña del Mar- Quillota tenía medicamentos vencidos en su bodega por más de 35 millones de pesos, cabe preguntarse ¿cuáles son las causas de tan mala gestión?
Este caso, como en otros encontrados en instituciones públicas, responden a una mala administración de los fondos asignados a la compra de fármacos. Los organismos cuentan con protocolos y procedimientos para evitar este sobre stock de productos que, a la larga, influyen en el manejo que se hace de los recursos y, en el efecto de dejar algunas veces de comprar fármacos que sí se utilizan y son indispensables para la salud de la población.
Este hecho deja a la vista además que no se utilizan mecanismos existentes para controlar los stocks de insumos, como las cartas de canje con los laboratorios. Esta herramienta es una vía para que los recintos de salud cuenten con medicamentos próximos a vencer, pero cambiables una vez que los proveedores (laboratorios) tengan nuevas producciones. Así se les asegura a los pacientes sus medicamentos y/o Insumos y los proveedores evitan multas.
Toda institución de salud debe tener procedimientos de revisión de medicamentos e insumos para que no se venzan. Por ejemplo, una vez al mes se deben chequear todos los productos y hacer una especie de semaforización de acuerdo a tiempo de vigencia.
También cumplir con programas de control de existencias usando las fórmulas correspondientes de stock máximo, mínimo, crítico y de reposición; además de practicar las normas FEFO de almacenamiento (primeros en expirar, son los primeros en salir), son remedio a la enfermedad de la mala administración de las bodegas y farmacias de establecimientos de salud, que mantienen fármacos vencidos y que pudieran ser entregados a los usuarios, con el consiguiente daño a la salud de las personas.