Un estudio del INTA y de la U. de Playa Ancha muestra que entre 1987 y 2007 el consumo diario de bebidas gaseosas y jugos azucarados aumentó en promedio de 166 centímetros cúbicos (per cápita) a 289 cc. Esto es 151% de incremento. El análisis consideró sólo lo que se bebe en el hogar y no lo que las personas también compran en restoranes, lugares de estudio o de trabajo.
En la investigación se midió además lo que sucede en el quintil II de la población (estrato medio bajo) y el quintil V (estrato alto). Ahí se observa que en el sector de menor ingreso hay un mayor consumo por persona: de 397 cc pasó a 530 cc promedio diarios.