- Usted está en:
- Portada / Columnas de Opinión / Erica Castro
Los desafíos de Chile para que todas celebren la maternidad
La mortalidad materna es la expresión más objetiva de la inequidad y desigualdad a la que están sometidas las mujeres. De ahí que la maternidad como asunto de salud debe ser materia de regulación en la legislación sanitaria...
Domingo 10 de mayo de 2015
La mortalidad materna es un grave problema de salud pública, la cual tiene un gran impacto familiar, social y económico. La muerte de una mujer en el período del embarazo, parto o puerperio es una tragedia evitable. Más de un millón de niños/niñas cada año pierden a sus madres debido a su muerte en el período de la gestación o parto, con las consecuentes carencias afectivas y de protección. Así, como actualmente una gran proporción de mujeres en edad fértil son trabajadoras y económicamente activas, las muertes maternas generan una pérdida de la productividad económica y una disminución en los ingresos familiares.
Más de una mujer muere en el mundo cada minuto producto del embarazo y parto, donde menos del 1% ocurre en países desarrollados. Esto sugiere que esta mortalidad puede ser evitada si se dispone de recursos y servicios de salud adecuados. Se estima que un 40% de las mujeres tienen alguna complicación durante la gestación, parto o post parto y trescientos millones de mujeres sufren complicaciones a corto o largo plazo relacionadas con estos eventos. Podemos mencionar prolapso o descenso uterino; fístulas o comunicación entre el tejido urinario, genital y/o fecal; incontinencia urinaria; dolor en las relaciones sexuales; daño nervioso; infección diseminada a la pelvis e infertilidad.
Recientemente se ha publicado un ranking que compara datos de salud y bienestar de madres y sus hijos/as en 179 países. Según la investigación, Noruega es el mejor país para ser madre, mientras Chile ocupa el lugar número 48 a nivel mundial. Respecto al riesgo de muerte materna, Chile ocupa el tercero del continente, por debajo de Canadá y Uruguay.
La mortalidad materna es la expresión más objetiva de la inequidad y desigualdad a la que están sometidas las mujeres. De ahí que la maternidad como asunto de salud debe ser materia de regulación en la legislación sanitaria. En Chile, desafíos hoy son: el manejo integral de las gestaciones en las adolescentes y en mujeres que postergan su maternidad; la humanización del parto y la disminución de las altas tasas de cesáreas, considerado una alarma sanitaria. Pero la maternidad tiene también la naturaleza de un hecho jurídico del cual surgen derechos y obligaciones. De ahí que la legislación laboral y de la seguridad social debe contener disposiciones concretas acerca del resguardo de la mujer no sólo durante el período de gestación, sino que en todo su proceso reproductivo.
La maternidad involucra diversos matices como son los aspectos psicológico, social, espiritual, cultural, afectivo y biológico, de ahí que deben resguardarse las acciones realizadas a favor de la mujer en época de su gestación, parto, cuidados posteriores y crianza.