- Usted está en:
- Portada / Columnas de Opinión / Jean Gajardo
La importancia de los cuidados continuos en el cáncer
La muerte de David Bowie es un hecho lamentable para el mundo de la música y el arte. La legendaria estrella del rock mantuvo una lucha intensa contra un cáncer hepático durante casi dos años, que no logró sostener más allá de sus 69 años. Sus recientes creaciones son un reflejo de su deseo por mantenerse aun viviendo con esta enfermedad.
Viernes 15 de enero de 2016
La muerte de David Bowie es un hecho lamentable para el mundo de la música y el arte. La legendaria estrella del rock mantuvo una lucha intensa contra un cáncer hepático durante casi dos años, que no logró sostener más allá de sus 69 años. Sus recientes creaciones son un reflejo de su deseo por mantenerse aun viviendo con esta enfermedad.
El cáncer corresponde a la generación acelerada y excesiva de células anormales que crecen por sobre los límites normales, transformándose en dañinas y que pueden desplazarse a otras zonas del organismo, o metástasis. Es una de las principales causas de muerte a nivel mundial. Los cánceres más frecuentes son el de pulmón, estómago, hígado, colon y mama. En Chile, el cáncer constituye la segunda causa de muerte, después de las enfermedades cardiovasculares. Esta enfermedad tiene un alto impacto en la persona y su entorno familiar ya que provoca un deterioro del estado de salud importante y discapacidad.
El cáncer se genera combinando factores de la persona (como los genéticos) y de su ambiente y otros determinantes sociales de salud (como su estilo de vida, nivel socioeconómico). Debido a esto, nuestras conductas, hábitos y ambientes saludables, por ejemplo, libres de humo de tabaco, son importantes en su prevención. El tabaco en todas sus formas y el consumo de alcohol se asocian con un mayor riesgo de desarrollar cáncer hepático. Mantener un peso adecuado, el ejercicio regular y una alimentación rica en fibra nos protegen de varios tipos de cáncer, incluyendo el de colon.
La detección temprana del cáncer, es decir, antes que existan síntomas de un estado avanzado de la enfermedad, es fundamental para un mejor pronóstico, ya que muchos tipos de cánceres pueden ser sanados a través de cirugía, radioterapia o quimioterapia. Para esto, lo principal es que puedan ser detectados precozmente. Según cifras de la Organización Mundial de la Salud, cerca del 70% de las muertes por cáncer en el mundo se dan en países de bajos y medianos ingresos.
Para detectarlo de forma oportuna es fundamental realizar chequeos médicos recomendados. En Chile, las muertes por cáncer cervicouterino y mama se han reducido dado que se ha conseguido una mayor detección temprana a partir de la educación para la detección y los exámenes médicos correspondientes (como la prueba PAP y la mamografía).
La muerte de David Bowie y recientemente del actor británico Alan Rickman, también de 69 años, nos recuerda que el cáncer es una enfermedad de alta complejidad debido a su impacto en la calidad de vida y por la mortalidad que genera. Su abordaje debe articular un continuo de acciones de educación, prevención, detección temprana y apoyo integral en el diagnóstico y la vida cotidiana con cáncer. Tenemos aún una tarea pendiente en relación a los cuidados paliativos y el buen morir, de modo que en caso de ser inevitable, tengamos la oportunidad de fallecer con la mejor calidad de vida posible y, tal como lo hizo el artista inglés, en coherencia con nuestra biografía.